"En tu lugar"... Yo me leería este libro ;)

Normalmente, soy reticente a la lectura de la novela romántica pura y dura, excepto cuando combina la historia, lo auténtico, lo real, con el romance y la aventura. Ya hacía tiempo que tenía ganas de entrar en contacto con la obra de Christine Cross, una de las autoras del sello Selecta -PRH, con la que tengo el gusto de compartir editorial (aunque yo no le llego a los coturnos, todo sea dicho).

"En tu lugar" es la primera obra que leo de esta autora que, pese a su juventud, tiene ya varias novelas a la venta.

Nos encontramos en la Inglaterra victoriana (bueno, a decir verdad, el inicio sucede mucho antes). 

La niñera Betty cuenta una preciosa leyenda a las niñas a las que cuida: la leyenda del hilo rojo, una curiosa historia japonesa según la cual cada uno estamos unidos desde el momento en que nacemos a la persona amada por un hilo invisible de color rojo que sólo se hace visible una vez encuentras al ser que ha sido destinado como tu compañero. Ambas niñas escuchan con embeleso a su niñera y, si bien Katia suspira por un futuro amor, Isabella afirma que jamás se casará. 

No les falta razón: son fruto de un matrimonio sin amor entre un duque (jugador empedernido) y una bellísima aristócrata rusa de la que ambas niñas han heredado una excepcional belleza que no hace sino atraer la furia de su padre por encontrar en sus rostros el de la mujer a la que se encuentra atado y a la que desprecia sobremanera. Harta de los desplantes e infidelidades de su marido, la bella rusa trata de huir con sus hijas a América. No obstante, una de las niñas está tan enferma que debe quedar en Inglaterra, al cuidado de la fiel Betty y bajo el yugo de su malvado padre.

Al cabo de los años, el destino quiere que las niñas vuelvan a encontrarse, ya mujeres. Ambas son increíblemente bellas, ambas tienen nombres de grandes reinas:

-Isabella, por Isabel I de Inglaterra.

-Katerina/Katia, por Catalina la Grande, emperatriz de todas las Rusias.

Pero no son iguales: Katia es dulce, introvertida, recatada; Isabella es valiente, decidida y autosuficiente.

El destino no ha sido nada benévolo con Katia, la gemela que ha quedado en Inglaterra, pues su padre la ha usado como moneda de cambio para paliar sus deudas de juego, y está a punto de unirla otra vez a un palurdo que sólo aspira al título de la joven y bella aristócrata. En medio de su desesperación, hace un desesperado llamamiento a su hermana, que aún vive en las Américas, pese al fallecimiento de su madre. Isabella no lo dude: pese al temor que le provocan los recuerdos de su padre, parte rumbo a Inglaterra en compañía del atractivo escocés Mac para salvar a su hermana de un matrimonio no deseado. En su aventura, Isabella no dudará en sustituir a su hermana a ojos de la sociedad para intentar alterar los planes de su padre. Sin embargo, la aparición del seductor y enigmático marqués de Allensbury parecerá alterar el mundo de Isabella...

Ambas hermanas han sufrido... Ambas hermanas conocerán el amor... Ambas hermanas están unidas por un lazo inquebrantable que sólo los gemelos pueden explicar. 

Debo reconocer que, al leer la historia, el personaje que más ha acaparado mis simpatías ha sido Mac, amigo de la infancia de Isabella y su fiel colaborador. Igualmente, me ha encantado el tratamiento que le da a la joven reina Victoria en el inicio de su reinado. Es de sobras conocida la personalidad cambiante y caprichosa de la reina, que no dudaba en hacer que sus deseos fueran ley, así como por lo idolatrado que tenía a su joven consorte, Alberto de Sajonia-Coburgo. La parte política, también se encuentra muy bien tratada y documentada.

Igualmente, me encanta el tratamiento con el que la autora ha reflejado los momentos de pasión, sin caer en el vulgarismo. Cada frase, cada párrafo, es pura delicia; leer los detalles de los vestidos, de los salones de baile, hace que casi puedas tocar el ambiente. Incluso puedes llegar a percibir el aroma de los jardines y los bosques. Parece que la Naturaleza se convierte en una con la novela, pues en ella donde los personajes se manifiestan como son y donde dan rienda suelta a los sentimientos que albergan.

Aun así, hay un personaje que pide a gritos una historia: la madre de las gemelas. ¿Cómo llegó esa preciosa y valiente aristócrata rusa a Inglaterra para acabar con un ser tan despreciable? ¿Cuál fue su vida en la Gran Rusia?  No sé, esa mujer ha llamado mi atención y me gustaría saber más sobre ella. Pero, claro, ya me conocéis: soy amiga de conocer lo que hay detrás de los personajes y sus historias.

No dudo que, tras leer "En tu lugar", leeré más obras de Christine. De hecho, "Algo más que una dama" ya se encuentra reservada en mi ebook para leerla en cuanto salga ^_^

Grandes autoras tiene Selecta, sin duda.