Adentrándome... "En los ojos del highlander"

Mucho tiempo sin pasarme por aquí, pero por fin he encontrado un huequito para ponerme delante del ordenador y empezar a escribir. En este caso, os traigo una nueva reseña de una compañera de editorial a la que tenía ganas (somos muchas y no me da la vida para leeros a todas, pero poquito a poco).

Hoy quiero hablaros de la historia de la autora Ana E. Guevara, titulada "En los ojos del highlander".

Lo primero que quiero aclarar es que no soy muy de leer novelas románticas puras y duras, girando mis intereses más en la órbita de la histórica (ya sea histórico-romántica, aventuras, policiaca, etc). Por lo que leer una novela de romántica contemporánea suponía un reto para mí. Cierto es que la elegí por dos motivos: por la portada (tenía un algo que me atrapó desde el primer momento) y por la ambientación. ¿A quién no le apasiona Escocia? ¿Quién no ha oído hablar de los aguerridos highlanders? Y no os hablo solo del todoposeroso Jamie Fraser, de "Outlander", sino de los guerreros toscos, apasionados de Escocia que, segíun se cuenta, no llevan nada bajo el tartán. Sí, esos mismos. 

En cuanto a su sinopsis, es la siguiente: 

¿Exiten los highlanders tal y como nos los han contado? ¿Guerreros musculosos y sin miedo, con falda, y sin nada debajo? ¿Crees que no?

La protagonista de esta historia tampoco, hasta que se presentó uno en su consulta y tuvo que cambiar de idea...

¿En pleno siglo XXI existen los highlanders?

«Hombres aguerridos, musculosos y sin miedo a enfrentarse a los mismísimos ejércitos ingleses vestidos con tan sólo una falda de cuadros (y sin nada debajo, chica, que esto es importante). De ojos verdes y barba pelirroja cuya presencia bastaba para dejar sin aliento al más intrépido de sus enemigos.

Pues sí, mujer, sí que existen. Y te lo digo yo que tuve uno en mi consulta hace poco. Y ni siquiera era él el accidentado, sino que vino acompañando a un amigo. Y es que además de estar buenísimo, este escocés es buena gente.

Vamos, un auténtico caballero con un punto peligroso, a la altura del mejor James Bond de la historia. Está claro que me refiero a Seann Connery, quien, por cierto, también es escocés.

Pero ya me estoy liando otra vez, es que yo me pongo a hablar de hombres fornidos y se me va el santo al cielo. Quédate conmigo y te cuento toda la historia, que ya verás como cuando termine tú también vas a querer poner a un lord de las Tierras Altas en tu vida.»

MI OPINIÓN/ RESEÑA (procuraré no destripar demasiado):

Emma es una traumatóloga de éxito. Trabaja en una prestigiosa clínica de Madrid y tiene el respeto de sus compañeros. También tiene un grupo de amigas que la quieren y le apoyan en todos los pasos que da en la vida.  Y un novio que... Bueno, tiene novio. 

Aun así, la relación de pareja de Emma no es para nada idílica. Su novio, una especie de comedor de luz sin oficio ni beneficio, vive del trabajo de ella, habiendo convertido la vivienda de la doctora en el centro de operaciones de sus continuas locuras. Un día, Emma se lo encuentra en la cama con otra mujer y decide poner punto y final a su relación. Sus amigas no dudan en acompañarla en ese trance, aunque todas coinciden en que va a ser una liberación. Para cambiar un poco de tercio, comienzan a preparar la despedida de soltera de Laura, una de las chicas, que está a punto de casarse y adora a los highlanders. 

Un día, tres gigantescos escoceses llegan a la consulta de Emma para que le recoloque el brazo a uno de ellos. Los tres son enormemente atractivos, pero es William el que fascina a nuestra protagonista. La atracción entre ellos es casi instantánea y, cada escena, transmite la química que hay entre ellos.

En este punto, es donde me costó un poco más leer/seguir el hilo porque, desde que los dos protagonistas dan el paso de tener una primera cita y conocerse hasta que viajan a Escocia, la acción se me antojaba un poco lenta. Eso sí, hay un viaje al aeropuerto donde se produce un reencuentro con el exnovio que aporta el puntillo hilarante a esta parte de la trama. La verdad, este personaje ha sido el que más risas me ha sacado por lo "ido" de la cabeza que está. A veces, se me antojaba como una especie de Peter Pan, un niño en un cuerpo de adulto que se negaba a crecer y asumir la responsabilidad y culpa de sus actos, alguien que cree que todo el mundo está equivocado menos él. Será Emma, con su fuerte carácter, la que le pondrá las peras a cuarto y le dará un golpe de realidad a mano abierta.

El resto, es un maravilloso recorrido por las highlands. La descripción de los ambientes, lugares y recorridos es de lo mejor de la novela. Es como si realmente estuvieras allí y pudieras aspirar el olor de los campos. Y es allí donde pasa un acontecimiento que pondrá a prueba la relación entre Emma y William y descubrirá a la doctora la realidad del ambiente en que se mueve su enamorado: ¡viene de familia noble! y, para colmo, su madre no está dispuesta a permitir que la relación entre su hijo y la española avance, sino que prefiere a una belleza rubia y fría que hará lo posible para aislar a Emma. 

¿Triunfará el amor o los lazos familiares impulsarán a William a anclarse a una dama de alcurnia a la que no ama?

A salvo de un par de errores que desconocería si no hubiera tenido un amigo que trabaja en el mundillo de los jet privados, el libro es ameno, divertido; una lectura ligera que buscaba para estos largos días de confinamiento. 

Lo mejor, ha sido la relación entre Emma y sus amigas (Laura, Diana y Yuki), que demuestran estar en las duras y en las maduras. Cada una, en su línea: Diana es la voz de la razón, la templanza, y a pesar de su brusquedad, demuestra tener un buen fondo; Yuki es la más opacada por sus compañeras de viaja, es la calma, la confidente en silencio; Laura es la inocencia, la fantasía, la princesa del cuento; Emma es una mujer con las cosas claras, de nuestro siglo, que actúa, que lucha... Pero, al igual que muchos cuando nos ofuscamos, se deja llevar por el fulgor del momento.

Lo peor, un detallito del final que no os voy a desvelar, pero que no podría considerar como lo peor, peor. Es solo una opinión y "yastá" :P  

A decir verdad, no creo que el libro tenga nada malo. 

Ana tiene una narración tan amena, divertida y agradable 

que me ha hecho querer descubrir más de ella

 y estoy deseando pillar su próxima novela para disfrutar más de su pluma.

Me ha encantadao y me ha sorprendido gratamente. 

Para repetir con Ana y tenerla muy en cuenta, pues viene pisando fuerte.

Muchas gracias, Ana, por hacer que estos días de cuarentena sean más llevaderos ^_^